Si tienes más de 35 años, sólo tienes que echar la vista atrás para recordar cómo era eso de buscar trabajo cuando eras más jovencito Y si tienes aún más años en tu DNI (que no en tu cuerpo y mente, of course), la diferencia es aún más notable.
Pero todavía hay quien sigue utilizando la misma plantilla de CV que utilizaban sus padres y se dedica a echar currículums. Incluso los llevan en mano a la empresa, porque es mejor que mandarlos por correo postal y que te vean la cara, incluso pueden hacerte la entrevista en ese mismo momento... ¿te suena?
Pues no, las cosas han cambiado mucho e incluso aunque no se llegue al extremo del párrafo anterior, es necesario adaptarse a lo que el mercado laboral requiere para poder tener éxito en la búsqueda de empleo.
A continuación encontrarás algunas cosas que deberías desterrar de tu currículum ya si quieres adaptarte a las nuevas tendencias a la hora de optar a un empleo.
El formato
La expresión Currículum Vitae al comienzo del documento. ¿A quién se le ocurrió la feliz idea que luego han (hemos) imitado la mayoría en un momento u otro? ¿Alguien pone Carta al comienzo de una misiva? Pues eso...
Las tipografías ilegibles, sosas o poco profesionales. Deberías desterrar las que imitan las letras escritas a mano (como la Lucida Handwriting y similares), las excesivamente adornadas (como la Kuntsler Script y otras parecidas), las que no tienen personalidad (como las Courier o las Times New Roman) o las de estilo infantil (Como la Comic Sans y demás horrores). Las que se leen bien y son profesionales como la Arial, la Helvetica, la Verdana o la Corbel pueden ser buenas elecciones.
Los márgenes demasiado grandes, porque te obligarán a ampliar tu CV a más de una página. Y también los que sean pequeños, porque darán la sensación de abigarramiento y dificultarán la lectura. Si debes reducir los márgenes para ahorrar páginas, no debería de ser menor del rango 1,3-1,5 en el margen superior y el inferior y de 1,8-2,0 en el derecho e izquierdo.
El interlineado excesivo o mínimo. Al igual que los márgenes, un interlineado inadecuado impide una lectura correcta del documento. Lo ideal es que sea entre 1,2-1,5 puntos más que la tipografía que se emplee.
La mezcla de estilos. Utilizar varias tipografías distintas, diferentes interlineados, muchos colores... son el pasaporte para que no te tomen en serio y tu hoja de vida profesional termine archivada en la "P" de papelera. Esto puede tener algunas excepciones si el trabajo que pides es de tipo creativo y aun así tampoco es conveniente pasarse.
La superpoblación de viñetas. Procura no abusar de las viñetas para señalar distintos conceptos. Si has reducido el currículum lo suficiente, no necesitarás emplear muchos.
Enviar el CV en formato .docx. Al convertir el documento en el equipo del reclutador, puede que el texto pierda el formato... y tú quedes muy muy mal. Procura enviar siempre el currículum en PDF.
Los datos personales
El nombre completo. Cada vez se tiende más a incluir la inicial y el apellido únicamente. De ese modo podrás sortear una discriminación inicial por tu género.
La foto. Aunque hay quien aboga por la inclusión de la fotografía en el CV, mi consejo es que no la pongas. Lo que tiene que interesar al seleccionador en primera instancia en tu experiencia y formación, salvo que el puesto esté relacionado con la imagen. Piensa que tu foto puede excluirte inmediatamente por factores tan poco profesionales como tu edad, tu género, tu aspecto más o menos agraciado, incluso tu peinado o tus complementos.
La fecha de nacimiento. Evita que tu edad sea un hándicap incluso antes de llegar a una entrevista personal. Aunque el resto de datos del CV le darán pistas al seleccionador acerca de cuántos años tienes, lo cierto es que verlo escrito directamente llama más la atención.
El estado civil. Por ejemplo, en algunos casos ser soltero puede ser una ventaja, porque busquen a un candidato con más posibilidades de movilidad; mientras que en otras prefieran a uno casado, porque consideren que así será más fiel a la empresa al necesitar mantener el puesto de trabajo. Aunque ambos criterios son injustos y subjetivos, pueden retirarte de la selección antes incluso de comenzar, por lo que conviene dar pistas sobre el estado civil.
El documento identificativo. Nunca deberías incluir el número de DNI o equivalente. Es un dato personal que únicamente deberían requerirte cuando vayan a contratarte.
La forma de contacto
Tu dirección postal. Aunque los seleccionadores suelen ser bastante profesionales, puede que si vives lejos del puesto de trabajo al que optas o si tu domicilio está en una zona privilegiada o marginal, ni siquiera pases el primer paso del proceso de selección. Mejor indica sólo la provincia.
Una dirección de e-mail poco profesional. Las direcciones del estilo de misshellokitty@hotmail.com o elguapodelaplaya@gmail.com no son la mejor carta de presentación si estás buscando empleo. Procura que contengan tu nombre y al menos un apellido, para que sea identificable.
La dirección de correo electrónico de tu puesto de trabajo actual. Si no estás en paro y lo que quieres es cambiar de trabajo, procura no utilizar el e-mail del empleo que tienes ahora. Imagina el efecto que hará al seleccionador que estás utilizando recursos de tu empresa para cambiar de puesto. Y piensa también en qué pensarán en la compañía en la que trabajas en este momento, si monitorizan tu correo y ven una respuesta de un reclutador a tu solicitud de empleo; olvídate de las buenas referencias, seguro.
Varias direcciones de correo electrónico. Cuando incluyes varias direcciones lo único que puedes conseguir es que te pierdas algún mensaje. Si hay diferentes seleccionadores durante el proceso, puede que cada uno utilice una dirección y no prestes atención a alguno de los mensajes, pensando en que todos se comunicarán contigo en una.
Links a redes sociales. Lo ideal es incluir solamente el link a tu perfil de Linkedin, y siempre que esté completo y actualizado. Si el reclutador quiere
La experiencia y la formación
Poner primero la formación. Salvo que no hayas tenido ninguna experiencia profesional previa, lo más recomendable es colocar en primer lugar la información sobre los trabajos que has realizado antes. Salvo que haya lagunas importantes en tu experiencia reciente o tus primeros empleos sean más destacables, te conviene que aparezcan primero los trabajos más recientes.
Incluir los trabajos que has realizado hace más de 10 años. Salvo que hayas tenido el mismo puesto desde hace un par de décadas, es mejor que evites mencionar tu experiencia laboral más allá de 10-15 años. Que en tu CV aparezca a priori una larga trayectoria profesional puede ser un problema si la empresa prefiere trabajadores muy jóvenes.
Las fechas demasiado detalladas. Salvo que sea especialmente importante que especifiques la fecha completa cada empleo, es más recomendable indicar sólo el año. Esto es imprescindible si hay vacíos importantes en tu vida laboral.
Los títulos obvios. Por ejemplo, si tienes una licenciatura, indicar que tienes el graduado escolar o el bachillerato, es totalmente innecesario e inmaduro, se da por hecho.
Los niveles de conocimientos imprecisos. Los tradicionales "inglés: nivel medio" u "ofimática: nivel usuario" deberían desaparecer de currículum ahora mismo. Si te interesa recalcar el nivel, incluye el título obtenido, el número de horas o cualquier otro dato que permita al seleccionador apreciar realmente el conocimiento del idioma o la materia que dices conocer.
Excederte con la descripción de la experiencia o la formación. Procura que sólo aparezca lo fundamental, lo que pueda llamar la atención de la persona que lee el currículum para que accedas a una entrevista en la que puedas ampliar la información. Si la mayoría de nosotros escaneamos los textos muy largos cuando buscamos información en Internet, incluso los cerramos si vemos que son demasiado extensos... ¿cómo puede alguien pensar que un reclutador va a leer páginas y páginas con texto de relleno?
Y más...
Las habilidades genéricas. Si tienes que mencionar tus habilidades, procura que sean únicamente las que se puedan aplicar al puesto al que optas. También te recomendaría que las habilidades que menciones sean ciertas y que evites las expresiones demasiado manidas.
Los hobbies. Salvo que tengan que ver directamente con el puesto al que quieres acceder, no tiene ningún sentido que incluyas tus aficiones. Solicitar un puesto de trabajo no tiene nada que ver con un chat para encontrar pareja...
Las mentiras. Seguro que conoces el dicho "se coge a un mentiroso antes que a un cojo", pues es cierto siempre, sobre todo cuando se trata de la formación o la experiencia laboral. Si te pillan en una mentira, además de sonrojarte innecesariamente, seguro que serás apartado del proceso de selección; por no hablar de que tu falta de sinceridad puede ir más allá de esa empresa.
Las justificaciones. Las razones por las que quieres solicitar el trabajo no deben aparecer en el CV, para eso está la carta de presentación. Si lo que se busca es aligerar la información recogida en la hoja de vida laboral, no tiene sentido engordarla con justificaciones varias. Además, el mismo currículum puede servirte para varias empresas y puestos similares, de ese modo sólo tendrás que personalizar la carta de presentación.
El sueldo. A nadie en su sano juicio se le debería ocurrir incluir el sueldo que quiere ganar en un currículum. Es un tema a tratar en la entrevista personal, y en muchas ocasiones no se debería tocar ni siquiera en el primer encuentro cara a cara. Si reflejas tus pretensiones económicas reducirás (o eliminarás) las posibilidades de negociación.
Los motivos del despido del puesto anterior. Aunque no debes mentir acerca de este tema, debes explicarlo en la entrevista personal, nunca por escrito en el CV. Lo que cara a cara se entiende bien, puede ser una barrera cuando se lee sin más explicaciones.
El ego. El currículum debe estar elaborado para la persona que va a leerlo, no para hacer un alarde de lo buenísimo que eres. Por supuesto que debes mostrar lo que sabes y la experiencia que tienes, pero con el único fin de hacer saber al seleccionador cómo ese bagaje puede ser útil para su empresa.
El yo, yo, yo. Al hilo del punto anterior, te recomiendo que no emplees el "yo" de manera excesiva a lo largo del documento.
Ahora ya sólo me resta desearte suerte en tu búsqueda de empleo.
Post relacionados:
Actualiza Ya tu CV (I)
Actualiza Ya tu CV (II)
Consejos para Preparar tu Búsqueda de Empleo
18 Tips para Despedirte con Clase del Trabajo
La primera vez que apareció el post Esto es lo que Debes Eliminar de Tu CV Ya fue en el blog de Todos Somos Clientes.
Esto es lo que debes eliminar de tu CV ya by 1 de N Tecnologías de la Información - Arancha Moreno is licensed under a Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-CompartirIgual 4.0 Internacional License.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Estamos encantados de que nos dejes tus aportaciones, porque tu opinión es importante para nosotros. Sólo te pedimos que, por favor, no publiques links ni contenidos publicitarios de ningún tipo, porque estos no serán publicados. Si deseas anunciarte, contacta con nosotros previamente. Gracias.